Días antes de volver a ver a la #obstetra empezó a dolorme el abdomen, el lado derecho. Era un #dolor molesto, agudo, pero lo aguanté hasta la visita semanal en el #hospital.
Cuando llegué ahí para la revisión se juntaron dos cosas terribles: el #bebe seguía sin líquido amniótico y mi dolor era debido a una #infeccion, la cual me ponía en riesgo si me ponía de #parto ya que podría rajarme el útero con el cerclaje.
La obstetra y el jefe de #pediatria se sentaron a hablar con nosotros. Nos enseñaron radiografías de niños que habían nacido sin tener líquido en el #embarazo. Eran niños con los pulmones raquíticos, con altas probabilidades de tener discapidad física y, además, con la infección corría el riesgo de una discapacidad mental muy severa...
La #decision ya parecía más que obvia: teníamos que interrumpir el embarazo o estábamos condenando a una muerte casi instantea al niño cuando naciera o a una discapacidad muy grave, con daños cerebrales...
Pero, antes de parar el embarazo tenía que pasar de nuevo por #quirofano para quitar el #cerclajeabdominal.
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